lunes, 11 de abril de 2011

Acepta Kadafi un plan de paz propuesto por delegados de la Unión Africana

De izquierda a derecha: el presidente de Sudáfrica, Jacob Zuma; del Congo, Dennis Nguesso; el líder libio, Muammar Kadafi; el mandatario de Mauritania, Mohamed Ould Abdel Aziz, y el Comisionado de la Unión Africana, John Bing, ayer en Trípoli. Los representantes africanos son mediadores para resolver el conflicto en Libia. Hoy se reunirán con líderes rebeldes.

Ajdabiya, 10 de abril. Muammar Kadafi aceptó un plan de paz para poner fin a la guerra civil en Libia, aseguró este domingo el presidente sudafricano, Jacob Zuma, después de dirigir negociaciones de una delegación de líderes africanos en Trípoli.
La delegación del líder hermano ha aceptado la hoja de ruta presentada por nosotros. Tenemos que dar una oportunidad al cese del fuego, dijo el gobernante sudafricano.
Zuma, quien junto con otros cuatro jefes de Estado africanos se reunió con Kadafi durante varias horas en el complejo del líder de Libia de Bab Aziziyah, también pidió a la Organización del Tratado del Atlántico Norte que detenga los ataques aéreos contra objetivos del gobierno libio para dar una oportunidad al cese el fuego.
Añadió que la delegación de la Unión Africana (UA) que conversó con Kadafi viajará ahora a la ciudad oriental de Bengasi para conversar con rebeldes, aunque aclaró que por cuestiones de agenda él saldría esta misma noche de Libia.
Ninguno de los que participaron en las conversaciones dio detalles de lo que contenía la hoja de ruta. Los rebeldes han dicho que no aceptarán nada que no incluya el fin de las cuatro décadas de poder de Kadafi, pero las autoridades de Libia dicen que éste no renunciará.
La delegación de la UA, encabezada por Zuma, está integrada también por los mandatarios de Mauritania, Mohamed Ould Abdel Aziz; Congo, Dennis Nguesso; Mali, Amadou Toumani, y el canciller de Uganda, Henry Otyem.
Analistas pronostican un conflicto total de baja intensidad que podría llevar a una división entre este y oeste en el Estado del norte de África, gran productor de gas natural y petróleo.
En tanto, el Comité Internacional de la Cruz Roja (CIRC) expresó su preocupación por la suerte de inmigrantes, entre 6 mil y 7 mil personas de Egipto, Sudán, Chad y otros países, que, indicó la vocera Nicole Engelbrecht, se encuentran atrapados en el occidental puerto libio de Misurata, disputado desde hace un mes por la oposición y las fuerzas leales al coronel Kadafi.

Protesta en El Cairo para exigir a militares cumplir con las reformas democráticas

El Cairo, 10 de abril. Cientos de personas protestaron hoy en la plaza Tahrir de El Cairo para exigir que los militares cumplan sus promesas de reformas democráticas, mientras el ex presidente Hosni Mubarak, quien fue llamado a declarar ante la fiscalía por acusaciones de corrupción, se dijo víctima de unacampaña de difamación.
Mubarak y sus hijos Alaa y Gamal deberán responder ante la justicia, en fecha por determinar, sobre el uso de la violencia durante la rebelión popular que llevó a la caída del ex presidente, y por el manejo de dinero público.
En un mensaje sonoro difundido por la cadena Al Arabiya, Mubarak dijo que no puede guardar silencio ante las tentativas de atentar contra mi reputación y mi integridad, y desmintió tener una fortuna en el extranjero.
En tanto, el secretario general de la Organización de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, externó su preocupación al presidente de Siria, Bashar Assad, por la violencia desatada durante las manifestaciones, en particular por las muertes del viernes en la ciudad de Deraa, que, de acuerdo con ONG sirias y kurdas son 26, además de otros diez decesos en aldeas aledañas.
Ban destacó que no hay alternativa al desarrollo de un diálogo inmediato e incluyente en torno a amplias reformas en Siria, mientras Assad volvió a acusar hoy a poderes externos de urdir actos violentos contra manifestantes y recordó que adelanta reformas políticas y sociales. Sin embargo, en la ciudad de Banias fuerzas leales al presidente dispararon contra personas que resguardaban una mezquita, con saldo de tres muertos.
En Yemen, el Consejo de Cooperación del Golfo, que busca mediar en el conflicto, dijo en Arabia Saudita que el presidente Alí Abdalá Saleh debería entregar el poder a su vicepresidente para solucionar la crisis en su país, y permitir a la oposición liderar un gobierno de transición.
Movilización en la plaza Tahrir, en El Cairo, en demanda de reformas prometidas por los militares que asumieron el poder tras la salida de Hosni Mubarak, quien fue llamado a declarar ante la fiscalía por cargos de corrupción.